viernes, 30 de octubre de 2015

Pekin City - Restaurante

Todos los mortales tenemos esos 60 minutos express de almuerzo, donde de pronto nos dan ganas de ir a comer algo rico y nuevo para salir de lo cotidiano. Fue así que este día Gabriel fue por mí a la oficina a la una de la tarde para ir por algo que nos quedara céntrico a los dos, y es como fuimos a parar ahí por el Hilton, sobre la Avenida Las Magnolias para ser exacta (o por "La Zona" para ser cool).

Vimos (por los símbolos, signos o babosadas chinas que ponen a la vista) que era comida oriental, por lo que decidimos entrar y darles la oportunidad de apantallarnos. Nos parqueamos en el estacionamiento privado con el que cuentan, nos recibió muy amable el gerente en la entrada y nos invitó a entrar. Habían dos butacas ocupadas y decidimos sentarnos en otra, justo abajo del único televisor plasma.

Se aproximó inmediatamente un atento y simpático mesero a ofrecernos el menú ejecutivo y el normal. Con afán de lavarme las manos, me levanté al baño de damas, el cual se encontraba impecable y es suficientemente amplio, lo que me gustó mucho. Regresé a la mesa con Gabriel, quien estaba afanado viendo el menú. Nos dispusimos a ver qué ordenábamos y el menú ejecutivo del día nos pareció perfecto (por sólo $5.00, cada día te dan a elegir entre 3 platillos los cuales van acompañados de arroz frito y chao mein, con una sopa de entrada y por supuesto, bebida). Gabriel se fue por el cerdo rostizado con salsa agridulce y yo por los vegetales mixtos SIN tofu (tampoco ando con pelazones vea). Yo, como ya tú sá, siempre tomo agua, la cual no estaba contemplada entre las opciones. Sin embargo, el mesero muy amable me ofreció llevarme un vaso de agua (si, DE agua) sin compromiso, aparte de las dos bebidas que tu tío Gabriel se ganó.

Al corto tiempo nos llevaron las dos sopitas de Wan Tan de entrada, que estaba deliciosa y seguidamente nos llevaron estos monstruosos platos con lo que cada uno había pedido. Te digo: qué hartada, deliciosa y por supuesto "llenadera". Gabriel le dio vuelta a todo, yo tuve que pedir para llevar el arroz y el chao mein, porque no me lo pude comer todo. Ah, y olvidé contarte que cada orden también llevaba 2 panes.

 En lo que comíamos, pudimos sentir a 4 empleados (nuestro mesero, otros dos y un cocinero) observándonos fijamente, algo creepy, sin embargo después nos dimos cuenta que estaban en lo mejor de ver el noticiero en la tele que teníamos justo arriba de nosotros. Eso fue lo único que sí nos molestó un poco, pues no tuvimos nada de privacidad versus una demasiado buena atención. 

Finalmente, pedimos la cuenta y, como era de esperarse, nos la llevaron inmediatamente. Nuestro mesero ilidadestrella la fue a entregar y su amab fue tanta y la cuenta tan poca, que le dimos propina extra. Y nos fuimos felices, gordos y contentos.


Recomendaciones de Ariana:

El lugar queda en una zona segura y accesible, cuenta con parqueo privado y seguridad. Los empleados son muy atentos y amables y la comida verdaderamente estaba rica. Quiero hacer especial énfasis en que esa hartazón nos hubiera fácilmente costado cerca de 20 dls en otro lugar: como mencioné arriba, por sólo $5.00 te dan casi demasiada comida. Recomendadísimo ir si disfrutás de la comida oriental!

sábado, 17 de octubre de 2015

Worldgames - Multiplaza

Vos sabés que llegan días que ese niño interno que todos tenemos le agarra aquella jodedera vea, entonces nosotros, en uno de esos, decidimos con Gabriel ir a Worldgames, aprovechando que andábamos en Multi dando vueltas. Era cerca de medio día en un soleado sábado que entramos a este mini mundo mágico de maquinitas y juegos para la bichada.

Ya tenía mucho de no entrar, por lo que me emocioné más, puesto que lo han remodelado y de alguna manera se ven hasta más amplias las instalaciones. Nos acercamos al área del mostrador, donde muy amablemente nos atendió un muchacho, preguntándonos si ya contábamos con la tarjeta (donde te acreditan el monto que vos pidás), y la verdad yo andaba una pero más vieja que la cuca así que le pedí que me diera una nueva, por el valor de $1. Él la sacó y Gabriel pidió que nos acreditaran a ella $25.00, yo en ese momento me quedé como que "WTF?! tanto vamos a jugar?" ja, pero ya te cuento...


Bueno, no sé si por la cantidad que pedimos o qué, pero nos regalaron todavía $7.50 adicionales en la tarjeta, por lo que contábamos con un total de $32.50 para jugar, que yo, honestamente, juré que no nos lo gastaríamos todo en esa visita. También nos aclararon que otra modalidad de pago es hacerlo por hora, a $15 por persona (que incluye todas las maquinitas a excepción del trampolín). Bueno, pero ya con tarjeta en mano que entramos ya a las maquinitas, había música electrónica de fondo, la temperatura del lugar estaba agradable y había una gran variedad de juegos y maquinitas donde perder un buen rato el tiempo.


Comenzamos aproximándonos a una maquinita que es simulador de Avión, ya que Gabriel andaba ganas de hacerlas de piloto ($0.50). Luego, yo -como siempre- con ganas de mover el ya tú sá y me fui a hacerlas de break dancer al "DDR Dance Dance Revolution" ($1.00) que me encanta porque si bailás bien, tenés 3 diferentes canciones a escoger para bailar, si la regás en la primera se acaba el juego. Bueno, después vimos esta máquina que era como la de los discos de hockey, que se llamaba "Pacman Smash" y por curiosidad la probamos ($2.00) y bien chiva, dura poco la verdad, pero es como la del table hockey pero en esta salen montón de discos y comenzamos a tirarlos a la loca, lo que fue bien emocionante, los dos puros bichitos ahí.


Luego para sentirnos más grandecitos, nos fuimos para el toro mecánico que tienen, Gabriel lo hizo primero ($1.50) y logró no caerse, yo lo intenté después de él y me caí como 3 veces en lo que dura la babosada endemoniada. Luego, cerca del toro vimos este juego que se llamaba "Toonstone" ($1.50) que fue uno de mis favoritos, con escopeta tenías que dispararle a ciertos targets que se te indican y no era en pantalla sino que las cosas estaban justo ahí como bares, calaveras y cactus.

Después Gabriel vio el "Super Hacker" ($0.50) y quiso pegarle a la cosa, es de esas que te dan un martillo y tenés que pegar con toda tu fuerza, en este caso para demoler un edificio o no sé qué en la pantalla, a mí no me gustó y al final ni a aquel. Bueno, jugamos en varias maquinitas más, la mayoría andaban en los ($0.50) y finalmente llegamos a "Plinko" que quizá es la que más nos gustó, porque no mucha gente la entiende, por lo que pasa vacía, pero por $1.00 te dan seis monedas para lograr el objetivo del juego y la verdad es que te da muchos tickets. Le dimos como 6 veces e hicimos muchos tickets sólo ahí.


Bueno ya cuando nos habíamos acabado las bolas (sí, nos echamos los $32.50 jugando) nos fuimos a la máquina donde se meten todos los tickets que acumulaste y te los acumulan en la tarjeta (hicimos 749 tickets en total, pues la mayoría de los juegos te dan), claro, suenan a mucho pero los premios que tienen andan por los 22,000 tickets y así si querés un peluchito decente haha. Y bueno, finalmente, luego de una hora y media o dos, nos fuimos y salimos todos chorreados y felices.



Recomendaciones de Ariana:

Las instalaciones del local son muy buenas y la verdad ha mejorado muchísimo, hay una gran variedad de juegos para entretenerse y es un lugar tanto para grandes como para chicos. Creo que la modalidad de pagar por juego es mejor que pagar por hora, pues te podes tomar tu tiempo para poder elegir qué juego probar y eso. El hecho de no andar teniendo que meter monedas es un gran plus, pues es sólo de deslizar la tarjeta acreditable por las maquinitas. Finalmente, te recomiendo que cuando estés aburrido, andás cerca, o -con mayor razón- si tenés hijos, te echés un tu vistazo, de pronto y te animás y te terminás quedando un par de horas como yo.